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¿Cómo será la casa del futuro? Un taller de innovación para niños

Tenía muchas ganas de probar la innovación para niños.

Me han hablado de algunas experiencias de mini emprendedores, pero nunca había probado en carne propia.

Creo que tienen muchas cosas que necesitamos los adultos para innovar: falta de restricciones, atrevimiento, imaginación, capacidad manual…

Y quería ver qué podía aprender de ellos, para aplicarlo en mis proyectos con adultos

Y la experiencia fue super positiva.

Tanto, que me he animado a escribir un post.

Aquí va un pequeño resumen de mi taller de innovación con niños sobre la casa del futuro.

La innovación para niños es otra cosa

innovación para niños

Lo primero, es dar las gracias a Raquel, la tutora de la clase de mi hija Lucía, por dejarme un poco más de una hora para hacer un taller de innovación para niños.

Acostumbrado a trabajar con adultos, meterte en una clase con 24 niñ@s de 6-7 años es todo un reto.

Y a pesar de que se supone que tengo tablas en talleres de este tipo, te reconozco que estaba nervioso y comí poco ese día.

Porque la innovación con niños es otra cosa

Porque yo, como dinamizador, no soy capaz de ponerme en sus cabecitas

Sus esquemas mentales no tienen nada que ver con los tuyos o los míos.

  • No tienen muchas de nuestras restricciones mentales

Que lo único que hace es limitarnos la creatividad y la posibilidad de proponer ideas radicales.

  • Ell@s son nativos digitales

Su mundo (ahora) es diferente al que nosotr@s tuvimos a su edad

Nada les sorprende

Piensan que todo es posible y está digitalizado, pegado a un móvil o una Tablet

Sus varitas mágicas

Y claro, te pueden salir por cualquier lado

Ideas que ni se te pueden pasar por la cabeza, pero que a ell@s les parecen obvias

Y por si fuera poco, la capacidad de atención de un@ niñ@ de 6 años es bastante limitada

Aún así, aguantaron como campeon@s

Las etapas del taller

Con una hora una capacidad de atención limitada, no puedes montar un taller de innovación para niños muy intenso

Pero sí que diseñé un esquema muy sencillo, siguiendo las fases básicas de Design Thinking.

  • El reto

Lo primero que hicimos fue marcar el reto.

Qué es lo íbamos a hacer esa tarde

Y nos propusimos “inventarnos la casa del futuro”

Para centrar un poco más el tiro, concreté el reto en “imaginarnos cómo sería la casa de la Srta. Raquel (su tutora) cuando fuera una abuelita”

Si no teníamos el reto claro, podría ocurrir que los niños, con su creatividad, cada uno imaginara su casa

Esto es completamente reaplicable a la innovación en adultos: o tienes claro el reto y por qué hacerlo (tienes claro por qué quieres meterte en un proyecto de transformación digital?) o propondrás lo mismo de siempre. Nada innovador.

Y como los habíamos dividido en grupos de 3, pues íbamos a tener problemas para que se pusieran de acuerdo.

  • Empatía / descripción del usuario

A partir del reto, identificamos el usuario (la señorita Raquel).

Y tuvieron que imaginársela dentro de 30 años, dibujándola.

El objetivo de este ejercicio era que cada equipo tuviera una imagen clara (un “arquetipo” de usuario) para el que iban a inventarse la casa.

Por ejemplo, si un equipo pensaba que Raquel iba a tener un gato, pues el gato entraba en el diseño de la casa (un equipo se imaginó una piscina para el gato, dentro de la casa)

  • Brainstorming

Una vez que cada equipo tenía dibujado a su “usuario”, pasamos a hacer un brainstorming

Y 24 niños sin restricciones para inventarse cosas son una máquina de producir ideas

Avalancha!!

En 5 minutos llenamos una pizarra grande (de las verdes de los coles) con todas las ideas que iban proponiendo (lo puedes ver en la foto)

Por lo menos era de forma de ordenada, e iban levantando la mano

También fue curioso ver que, como en los grupos de adultos, en los grupos de innovación de niños también hay peques más participativos y otros que menos

Ayudado por Raquel, todos fueron proponiendo alguna idea de su casa del futuro.

La fase de selección de ideas nos la saltamos.

Dejé que cada equipo cogiera las ideas que quisiera de la pizarra para su diseño.

  • Prototipado

La fiesta final llegó cuando sacamos la plastilina, goma eva, tijeras, gomets y pegamento.

A los niños les encanta eso de manipular e inventar

En cambio cuando saco los materiales en un taller de innovación para adultos, al principio me miran con caras raras.

Aunque después se lo pasan en grande, quizás porque su cerebro activa los recuerdos emocionales de cuando eran pequeños.

Al llegar aquí, l@s niñ@s ya estaban cansad@s.

Para evitar que se dispersaran, les pedimos que incluyeran dos cosas en el prototipo:

    • dónde iba a estar la casa y
    • qué cosas iba a tener dentro, cogiendo las ideas que más les gustaran de las que habíamos apuntado en la pizarra.

Ninguna casa estaría en las ciudades.

Serían casas volantes, o en la montaña o encima del agua.

Curioso

Para mi sorpresa, un grupo que había estado bastante callado en las otras etapas, de repente empezó a montar las paredes de una casa en 3 dimensiones!

Nunca sabes quién puede tener las ideas más innovadoras.

Y al final, cada grupo presentó su prototipo al resto de la clase.

 

Mis aprendizajes sobre la innovación para niños vs innovación con adultos

El taller estuvo muy bien.

Algunos papis amigos me mandaron whastapp porque sus hijos estaban encantados con lo que habían hecho.

Yo salí un poco confuso, quizás porque la película previa del taller que yo tenía en la cabeza no salió como esperaba. Simplemente, tuve que dejarme llevar y disfrutar de la experiencia.

Pero con un poco de distancia, reconozco que estuvo muy bien y nos lo pasamos genial.

Tuvimos algún “mini problemilla” en algún grupo porque “es que no me dejan hacer nada” o “es que yo quiero que la casa esté en la playa y los otros quieren que esté en las nubes”

Nada que no pase con los adultos.

Mis aprendizajes que podemos tomar de la innovación para niños para nosotros en las empresas serían:

  • Ten una visión clara y compartida de para quién vas a innovar.

Dedica tiempo al principio del proceso de innovación a esta etapa, para evitar problemas y malos entendidos en el futuro.

  • No te pongas límites

Es quizás lo más complicado con los adultos.

Porque todos tenemos nuestra mochila de experiencias y emociones, que nos impiden

Por eso siempre pido a mis clientes que piensen que están en el mundo de Harry Potter y que quiero ideas basadas en unicornios mágicos.

  • Toma analogías de otras industrias, películas…

Una de las primeras ideas que salió fue la de montar una casa en el espacio.

Y eso es por la influencia de Star Wars

El servicio de McAuto de McDonalds se diseñó copiando la operación de cambio de neumáticos en las carreras de coches.

  • Juega, diviértete y adapta tu prototipo

Los mejores prototipos fueron los de los niños que empezaron directamente a modelar con la plastilina.

Según iban avanzando, iban añadiendo o quitando cosas.

No planificaron el prototipo.

Simplemente, construían

  • El conflicto es natural. Asúmelo y aprovéchalo

Como te he dicho, hubo algún problemilla en un par de equipos. Así que es natural.

En tus equipos de innovación habrá conflictos. Y eso es bueno (mientras la sangre no llegue al río).

Es una fuente de creatividad, porque obliga a encontrar mejores soluciones al problema.

  •  Cómo será la casa del futuro

Mi último aprendizaje, es un regalo para las empresas constructoras o los arquitectos.

La casa del futuro será automática.

En todo

Salieron ideas como

  • “que la tele cambie de canal con la voz”,
  • «un robot que haga la comida”,
  • “que me lave los dientes en el sofá”,
  • “un tobogán que se pliegue y abra para salir de la casa”,
  • “una cama que me transporte por la casa”….

Estas ideas de innovación para niños son naturales.

A nosotros quizás nos parecen tonterías o imposibles

Pero ell@s serán los arquitectos, ingenieros y diseñadores del futuro, y parece que lo tienen claro.

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2 comentarios

🙂 son fantásticos, aunque agotan!
Admirables los profesores que están al pié del cañón.
Cuéntales sobre Moley, el robot que hace la comida (a partir de 2017 me temo).
Los de 13-14 optan por ideas más «asequibles» como conciertos de hologramas.

Trabajar con chavales es una experiencia muy sana para replantearse la mejor manera de innovar. Enhorabuena!

Gracias María por comentar!! Lo de los conciertos de hologramas mola mucho. Tener a U2 en el salón de mi casa a tamaño real tiene que ser una pasada 😉

Un abrazo,
ANGEL