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Herramientas para innovar: La vigilancia tecnológica. Caso práctico Innolandia.es

Hoy vamos a hablar de una herramienta de gestión, y que se encuentra en la fase inicial del ciclo de la innovación: la vigilancia tecnológica.

De acuerdo al estándar de la norma UNE 166006:2006 Ex Gestión de la I+D+i (Sistema de Vigilancia Tecnológica), se trata de

un proceso organizado, selectivo y permanente, de captar información del exterior y de la propia organización sobre ciencia y tecnología, seleccionarla, analizarla, difundirla y comunicarla, para convertirla en conocimiento para tomar decisiones con menor riesgo y poder anticiparse a los cambios.

La vigilancia tecnológica, así como la vigilancia competitiva (que hablaré en otro post)  son dos vectores fundamentales para aumentar la rentabilidad de la innovación, mejorando las decisiones de inversión hacia aquellos proyectos con mayor probabilidad de generar una ventaja competitiva sostenible para las organizaciones y reduciendo los riesgos de su implantación.

Son dos procesos que se encuentran en la primera fase del ciclo de la innovación: la identificación de oportunidades / ideas.

 

Por qué necesitamos un sistema de vigilancia tecnológica

La misión clave de un buen sistema de vigilancia tecnológica es transformar toda la información disponible en conocimiento para tomar decisiones efectivas y ágiles. Y cada vez es más crítico. Actualmente la ventaja competitiva no es tener acceso a la información, sino saber utilizarla. 

El gran problema al que se enfrentan los directivos de cualquier organización es la enorme cantidad de información a la que tienen acceso, pero que muchas veces ralentiza la toma de decisiones, al no estar correctamente gestionada. Es lo que se conoce como el «big data dilema«. Aún más, el social media, los dispositivos móviles y sobre todo, el Internet de las cosas van a disparar el volumen de datos gestionados. El informe del McKinsey Global Institute es de gran interés.

Cualquier organización necesita conocer qué tecnologías existen, cómo evolucionan y sus posibles aplicaciones al negocio, pero en el caso de las organizaciones del conocimiento es aún más importante, debido a que el grado de innovación en servicios del conocimiento es relativamente bajo comparado con otras industrias. Aquellas organizaciones que dediquen tiempo y recursos a obtener información continua del mercado, la transformen en conocimiento y puedan agilizar la toma de decisiones mejorarán su posición competitiva en el mercado.

La otra razón por la que una organización KIBS necesita un sistema de vigilancia competitiva es para poder desarrollar con éxito una estrategia de innovación abierta. En mi experiencia en el CGCE, descubrimos que la vigilancia tecnológica ayuda a identificar los partners tecnológicos adecuados con los que desarrollar alianzas para el desarrollo de soluciones innovadoras que poder llevar al mercado.

Cómo diseñar un sistema de vigilancia tecnológica

Montar un sistema de vigilancia tecnológica efectivo interno es complejo y costoso para organizaciones de tamaño medio-bajo. Por eso, existen proveedores en diferentes industrias que ofrecen este servicio, además de tecnologías de última generación que acercan a las pequeñas empresas esta herramienta.

Antes de comenzar, la organización debe definir los objetivos a conseguir con este sistema y hacia donde orientar la captura de datos: nuevos materiales, nuevas tecnologías, evolución del mercado, etc…  Tradicionalmente, se han utilizado bases de datos de patentes, análisis de proyectos realizados, presentaciones en ferias / congresos y publicaciones especializadas, aunque Internet permite acceder a mucha más información.

La fase más compleja es el diseño del sistema de vigilancia, en cuanto a la identificación de las variables y las fuentes a seguir y la frecuencia de los outputs / informes. No hay que olvidar que se trata una herramienta para el fin de mejorar la posición competitiva de la organización, por lo que debe ofrecer conocimiento para tomar decisiones. No hay que volverse loco en identificar toda la información del mundo, sino hacer ya en esta fase un primer filtro para afinar en la búsqueda de las fuentes a seguir.

Finalmente, y no menos importante, es cómo gestionamos toda la captura y transformación de la información para la toma de decisiones. A mayor número de fuentes, mayor complejidad en el análisis y más necesidad de automatizar los procesos.  En este sentido, la herramienta innosense, desarrollada por el equipo de Miguel Borrás de Antara, que he tenido la oportunidad de probar, es sin duda la mejor solución que existe actualmente en el mercado hispano y con enormes posibilidades de uso para los consultores.

El caso práctico de Innolandia.es

Los suscriptores del Innolandia.es tienen acceso periódicamente a conocimiento de primer nivel sobre tecnologías y el mercado de servicios del conocimiento. Y para ofrecerlo, aplico un sistema de vigilancia tecnológica. ¿Cómo lo he puesto en marcha?

Inicialmente identifiqué las variables (innovación en servicios) y las fuentes a seguir: portales de innovación de la Comisión Europea, escuelas de negocios, buscadores de tendencias, observatorios de mercado y grandes consultoras, entre otras.

Las TICs permiten el acceso a esta información: redes sociales, RSS, alertas, búsquedas, etc… Lo complejo viene con la selección de la información de mayor interés y su análisis integrado, para entregar periódicamente conocimiento de interés a los suscriptores través del boletín de Innolandia.es y del informe mensual de vigilancia del mercado.

Para terminar, algunos links interesantes:

 

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