¿Cómo puedes construir una empresa innovadora?
Ahí lo dejo.
Esta es una de las preguntas que más me llega a mi blog Innolandia.es
Lo que yo llamo la carta a los Reyes Magos:
Tú ya sabes que construir una empresa innovadora no se hace de la noche a la mañana.
Estás hart@ de pedir recursos a tu Comité de Dirección, que no te los da y encima te pide resultados para ayer.
Sin entender que la innovación y el día a día llevan ritmos diferentes.
Que por muchos toboganes y salas molonas que pongamos en la empresa, no nos convertiremos en Google en dos semanas.
Por eso he escrito este post, para ayudarte a que le expliques a tu Comité de Dirección como se llega a ser una empresa innovadora.
Y que te dejen trabajar tranquil@.
Por mucho que he buscado, no he encontrado una clasificación estándar de los niveles de madurez de las empresas.
De hecho, si entras a buscar en Google aparecen 23 millones de resultados
No quiero que pierdas el tiempo, así que en este post te voy a dar los conceptos básicos para preparar tu aventura de construir una empresa innovadora.
¿Qué es una empresa innovadora?
Mi autor de cabecera sobre innovación es Clayton Christensen
Profesor de Harvard y creador de la teoría de la innovación disruptiva o del concepto “job to be done”. Imprescindible
Junto con otros colegas escribió el que pare mí es posiblemente el mejor libro sobre innovación que puedas encontrar: el ADN del innovador.
Si no lo has leído, te lo recomiendo absolutamente.
Comparto de arriba abajo la visión del profesor Christensen:
una empresa innovadora es la que tiene las personas con el ADN del innovador y los procesos para que estas personas puedan explotar su talento.
Si combinamos capacidades (comportamientos del ADN del innovador) con procesos (actividades, criterios, espacios, tiempo, reconocimiento) aumentaremos las probabilidades de conseguir resultados.
No hay más secretos.
No es un tema certificaciones, ni contar con el mejor software ni los mejores consultores.
Personas y procesos.
Diferentes estudios como el de Ideascale 2017 o el que hemos hecho en Innolandia.es sobre barreras para innovar, lo confirman.
La combinación de las capacidades con los procesos, te permitirán conseguir resultados (outputs) de forma sostenible, como ves en el dibujo.
Déjame profundizar sobre estas dos variables.
Capacidades (personas)
Para mí, necesitas tres tipos de capacidades dentro de tu empresa para innovar de verdad. Tranquil@, porque no tienes que ser hombre / mujer orquesta.
-
Capacidades para generar ideas, a través del ADN del innovador.
El estudio de Dyer y Christensen identificó 5 comportamientos que definen el ADN del innovador:
- Asociar entre conceptos (esta viene de serie, es genética)
- Preguntar Plantearse por qué las cosas son así y qué pasaría si fueran de otra forma
- Observar. A los consumidores y clientes, pero especialmente fuera de su sector, para traer ideas radicales
- Networking creativo. Crear redes creativas, donde compartir ideas e inspirarnos
- Experimentar. Realizar pruebas para comprobar lo antes posible si las ideas tienen sentido.
-
Capacidades para gestionar proyectos de forma ágil.
En un mundo líquido en el que nos movemos, no puedes estar 3 años desarrollando un proyecto, para descubrir luego que nadie lo quiere. Para eso necesitas desarrollar
- Habilidades de diseño de modelo de negocio, para aterrizar las ideas a conceptos deseables, realizables y rentables.
- Habilidades de lean start-up, para realizar experimentos rápidos y tomar decisiones sobre las ideas, mientras encuentras el modelo de negocio que funciona
- Habilidades de gestión de proyectos ágiles, construir tus ideas siguiendo el paradigma “agile”, de desarrollo iterativo.
Procesos
El maestro Xavier Marcet escribe en su libro Esquivar la mediocridad, que los líderes deben dejar espacio para que las personas con talento hagan su trabajo.
Ser humildes y no molestar.
Por eso, el primer elemento que necesitas una empresa innovadora es el liderazgo
No es casualidad que las empresas más innovadoras que admiramos todos estén lideradas por personas con altísimo ADN del innovador.
Si la Dirección de tu empresa no se cree de verdad la innovación y apuesta por ella, te recomiendo que presentes la carta de dimisión mañana mismo.
Pero vamos a suponer que tu Comité de Dirección apoya la innovación y pone recursos, aunque sean pocos. Entramos en la segunda variable de la ecuación de la empresa innovadora: los procesos.
Yo identifico dos niveles de procesos de innovación:
-
Procesos estratégicos:
Los que permiten definir una dirección de la innovación y asegurar los recursos y condiciones para que las cosas sucedan. Los procesos mínimos viables que necesitas son:
- la planificación estratégica y operativa,
- las condiciones para innovar (incluyendo capacidades y recursos)
- los criterios de toma de decisiones o gobernanza
- la comunicación de la innovación.
-
Procesos operativos:
Los que se refieren al día a día del innovador. Básicamente hablamos del ciclo de ideas, desde que se obtienen por diferentes fuentes hasta que se consolidan en el mercado. Los procesos incluyen:
- Herramientas y programas de generación de ideas,
- Aceleración de proyectos,
- Vigilancia tecnológica
- Implantación de los proyectos
- Cierre y paso a On-going
Los 4 pasos para construir una empresa innovadora de verdad.
Existen un montón de cuestionarios y modelos de innovación.
Casi tantos como consultores / gurús hay en el mercado (te dejo una lista en el Anexo para que puedas profundizar si quieres).
Incluso hay sellos, como el de Pyme Innovadora del Ministerio o una certificación UNE 166002, sobre la que se quiere construir una norma ISO.
Un negocio vamos.
Igual que poner toboganes no te crean una cultura innovadora, un sello menos.
Tengo clientes que tienen la certificación de la norma y su cultura de innovación deja bastante que desear.
Creo firmemente que el proceso por el que pasa cualquier organización que quiere convertirse en empresa innovadora tiene cuatro niveles de madurez, en función de las actividades innovadoras que realiza y los resultados que consigue.
Es lo que he llamado la pirámide de la innovación.
Es un proceso expansivo, similar al de un virus, que se puede encontrar con las defensas anticuerpos de la organización a cambiar las formas de hacer y entonces no consigue avanzar.
Paso 1: Hacer un proyecto.
Habitualmente una empresa empieza a innovar con un proyecto, porque hay alguna persona curiosa que quiere probar una forma diferente de hacer las cosas.
Nadie se lanza a lo desconocido sin hacer una prueba.
Paso 2: Hacer varios proyectos.
Una vez que se ha tenido éxito con el primero, empezamos a hacer varios y la empresa va cogiendo ritmo de crucero, aunque sin una estrategia definida.
En esta etapa quedan atascados muchas empresas, sin ser capaces de salir de la rueda del día a día.
Paso 3: Organizar el sistema.
Cuando la empresa lleva varios años haciendo proyectos, un directivo avispado se plantea que tiene que poner en orden la casa.
Ver que a pesar de los proyectos, no se acaban de conseguir los resultados, porque falta coordinar los esfuerzos.
Aquí es donde entran a jugar los modelos de innovación y es un salto cualitativo. Hacer proyectos es fácil. Gestionar la innovación no tanto.
Paso 4: Infectar la innovación en el ADN.
Es otro salto cualitativo y el más complicado. Conseguir una cultura innovadora en la empresa. Que la innovación forme parte del día a día de cualquier empleado de la empresa.
Aunque no existe un encaje total, sí que hay una importante correlación con la caracterización de las empresas para innovar que realizó hace unos años la Fundación COTEC.
Diseñando la empresa innovadora
En Innolandia.es aplico un enfoque de diseño en todos mis proyectos y más aún en los de sistemas de innovación.
Pensando en el usuario.
Es decir, en tus compañeros que tienen que innovar contigo.
Construimos la empresa innovadora desde las personas y no desde los procesos.
La experiencia, y las últimas investigaciones sobre innovación me han llevado a esta conclusión.
Fase 1: Diseño
Empezamos por crear capacidades en pequeños equipos piloto. Nuestros evangelistas.
Con estos equipos arrancamos pequeños proyectos de innovación, donde aplicamos metodologías ágiles de proyectos.
Así puedes conseguir algo muy potente:
resultados en muy poco tiempo, mientras creamos prototipos de procesos de innovación, que se prueban en la práctica y mejoramos en función de los resultados.
Fase 2: Escalado
Cuando vemos que los prototipos de procesos funcionan, los estandarizamos, mejoramos y ampliamos el alcance.
Porque, no te engañes.
Por muy bueno que sea el departamento de I+D interno que tengas, si quieres de verdad construir una empresa innovadora, antes o después tendrás que salir de tus cuatro paredes e infectar con el virus de la innovación al resto de compañeros.
Los retos
Como cualquier infección, aparecerán los anticuerpos (los trolls de la innovación) que intentarán que no el cambio no se produzca.
Durante este camino hacia la empresa innovadora, te enfrentarás con diferentes retos, que cada organización responderá de forma distinta.
- Fijar objetivos de innovación, para adoptar un enfoque más proactivo
- Generar más ideas propias proactivas, para anticiparse a la competencia
- Aplicar las herramientas de innovación en su caso particular
- Crear un proceso propio para gestionar las ideas
- Evaluar de forma más global (no sólo económica) las ideas para reducir riesgos
- Crear un ecosistema de socios tecnológicos de confianza para tus proyectos
- Conseguir más recursos para innovar
- Hacer más proyectos en paralelo
- Estructurar un sistema de vigilancia tecnológica sencillo y barato
- Diseñar un cuadro de mando global para demostrar el impacto de la innovación
- Sacar la innovación del departamento: Involucrar a más personas en la innovación
Ya sabes el camino que tienes por delante
El tuyo seguramente será diferente del de otro colega, aunque estéis en el mismo sector.
Lo importante es que te pongas en marcha y des el primer paso.
Y si quieres un guía que te acompañe, porque ya ha pasado por ahí, sólo tienes que pedirlo.
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