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Desde el estómago: Reflexiones muy personales sobre la crisis del COVID

Viernes, 1 de mayo. 7.30am

Llevo 30 días sin escribir un post

Demasiado. 

Por primera vez en mucho tiempo tengo el síndrome de la página en blanco

Tengo una lista de más de 70 temas que podría escribir

Pero abro el portátil, el Word y no soy capaz de darle a la tecla.

Todo esto de la crisis del COVID me está afectando, porque lo estoy viviendo en primera línea.

Gracias a Dios, ni mi familia, ni mis amigos cercanos ni yo nos hemos contagiado.

Pero lo he vivido muy de cerca, porque mi mujer es enfermera de UCI y tengo muchos amigos sanitarios.

El otro día hablaba con uno de mis alumnos de la primera edición del Máster de Innovación de Innolandia y le decía que quizás la página en blanco tenía un motivo.

Había un tapón que me impedía seguir escribiendo.

Por eso escribo este post muy muy personal. 

Las palabras salen desde el estómago.

Hoy no voy a hablar de innovación. 

Así que si quieres, puedes dejar de leer aquí y volver la próxima semana.

Tampoco voy a ser políticamente correcto. 

Innolandia es mi blog, mi casa en Internet. Y a veces lo utilizo como escapatoria y reflexión.

Disculpa mi tono y el contenido.

Pero hoy necesito darle al botón de publicar para cerrar una página mental y descargar toda la bilis y rabia que llevo dentro, que me está impidiendo seguir avanzando.

 

1L@s sanitari@s son personas.

#NiHeroesNiMartires

He visto cosas que no han salido en el telediario.

Fotos en grupos privados de whatsapp, con amigos sanitarios, muy graves

Sanitari@s muert@s de miedo ante la incertidumbre de lo que vendrá, preparando batas de protección con bolsas de basura, porque no tenían otra cosa.

Tengo amigas que se han tenido que mudar de casa, separarse de sus hijas de 2 y 3 años durante más de un mes.

En casa tenemos distanciamiento social desde el 20 de marzo, cuarentena preventiva. Habitaciones separadas, toallas separadas, 1 metro en el sofá.

Cambios de protocolos cada 12 horas, creación de UCIs improvisadas, personas con síntomas que no se pueden ir a casa porque no hay sustitutos.

Pero desde el principio se ha creado un mensaje “romántico”, sobre nuestros héroes sanitarios. 

Es una puta mentira.

Ese mensaje lo que encubre es que desde los puestos de responsabilidad sanitaria han dejado abandonados a los profesionales sanitarios. Desde el principio.

Que el % de contagio de profesionales sanitarios sea el más alto del mundo no es culpa de la gente de primera línea. 

Lo que descubre es una falta de medios y una lentitud asombrosa en reaccionar. Los sindicatos han tenido que llevar a los tribunales a los responsables.

Además, de hacer declaraciones absolutamente lamentables como que la culpa del alto contagio es “porque los profesionales viajaban”.

Vergonzoso. 

Al principio de todo esto, mi amigo Javi, médico de familia en un centro de salud lo dijo en un grupo que tenemos de whatsapp.

“No somos héroes, somos profesionales que hacemos nuestro trabajo, pero necesitamos que nos den los medios para hacerlo bien”

En otros países ya están dando pagas extra como reconocimiento. Aquí están finalizando los contratos del personal adicional.

Lamentable.

#2 Expertos en marketing político. Incompetentes en gestión.

Parto de la base que esta crisis supera a cualquiera

Y no dudo en ningún momento que la inmensa mayoría de los responsables políticos están haciendo todo lo que pueden lo mejor que saben.

Aunque alguno ha dado muestras para pensar lo contrario e intentar sacar provecho personal

Pero es en estos momentos es cuando hay que reconocer con humildad lo que se sabe y crear equipos independientes de personas de talento y EXPERIENCIA.

Cualquier directivo o emprendedor lo sabe.

Tienes que rodearte de un equipo con experiencia, que sepa más que tú y que te ponga en duda tus opiniones. 

Pero no. 

La mayoría de los responsables del Gobierno no tienen ni idea de gestión. No han tenido una experiencia previa de gestión pública o privada.

Y lo peor. No tienen la HUMILDAD necesaria para rodearse de un equipo independiente, de experiencia. 

En Italia ya lo han hecho. Han nombrado al ex CEO de Vodafone para crear un equipo con las mejores mentes del país para reconstruir su economía.

Por que no recurrir a gente como Pablo Isla, Kike Sarasola, Alejandro Rojas Marcos? 

Sin prejuicios de donde vengan. Ni color político, ni empresa, ni equipo de fútbol. Necesitamos a los mejores.

Pero no. Como tenemos gestores incompetentes y prepotentes. Así, llegan las cagadas.

¿Por qué no se han comprado los tests a empresas españolas con capacidad de producción? O material de protección?

¿No sabían que el mercado de mascarillas iba a colapsar al regular el precio? Joder, es de primer curso del grado de economía!!

Tenemos personas que sólo han trabajado dando clase o en un partido político y tienen a su cargo miles de millones de euros. Y la vida de millones de personas

Luego se escudan en comités técnicos sectarios, nada independientes, que no se enfrentan a las decisiones absurdas de sus políticos. 

Son expertos en marketing político.

En crear mensajes, historias, y difundirlas a golpe de tweet.

Pero luego las consecuencias las pagaremos todos. Las estamos pagando ya. 

Los autónomos seguimos pagando en abril las cuotas mensuales, cuando se anunció que se cancelaban en marzo.

En cualquier empresa privada o fundación, no contratas a nadie sin experiencia para un puesto de responsabilidad.

Debería regularse por ley los requisitos de cualificación técnica en experiencia (estudios no, que ya sabemos que se falsean) para acceder a puestos de ministros o consejeros.

Pero claro, así no podrían ser elegidos.

#3 Los políticos y la teoría de la estupidez

El economista Carlo Cipolla publicó en 1976 un estudio denominado Las leyes básicas de la estupidez humana”.

En ella se enuncian 5 leyes básicas. 

La más importante, la regla de oro define que:

Un estúpido es una persona que ocasiona pérdidas a otra persona o a un grupo sin que él se lleve nada o incluso salga perdiendo.

Si se combina el efecto de las decisiones en “me benefician a mí” con “benefician a los demás”, nos encontramos con cuatro cuadrantes de personas:

  • Incautos
  • Inteligentes
  • Malvados
  • Estúpidos

Imagen: Wikipedia

Se ha demostrado por varios estudios que si se hubiera actuado antes, se hubiera reducido en un 60% las tasas de contagios.

Se dice que no se podía prever.

Otra mentira.

Existen estudios desde 2014!!! que prevenían sobre el riesgo de una pandemia global. El Foro Económico Mundial realizó una simulación en 2019 sobre la situación de una pandemia.

Pero mientras, los políticos, de todos los países, decidieron mirar para otro lado.

Luego están los lunáticos como Boris Johnson o Trump.

El problema es que según la 5ª regla de Cipolla 

“Una persona estúpida es lo más peligroso, es más peligrosa que un bandido”

 

#4 Transparencia y rendición de cuentas. Esa utopía.

Las personas nos merecemos que nos traten como adultos.

Que no nos escondan los problemas, como si fuéramos niños.

Incluso, a los niños no hay que esconderles los problemas

Hay que explicárselos, pero en su idioma. Incluso algo tan jodido como el COVID. Nos merecemos que nos digan las cosas con transparencia.

Pero no.

Nos han mentido como ciudadanos, sobre el impacto de la pandemia.

Han modificado criterios de cálculo, se han ocultado cifras en diferentes Comunidades Autónomas. 

Han mentido a la Comisión Europea con el déficit público. Han mentido a la OCDE con el número de tests.

Han mentido con las compras de materiales de protección, que empezaron tarde y mal, como se está demostrando en los tribunales.

Pero ojo con llevar la contraria. He visto a personas troleadas en internet por sus propios compañeros de partido! 

Están mintiendo con lo que va a pasar, y es que Europa nos va a tener que rescatar (lo llame el Gobierno como lo llame), porque simplemente no tenemos dinero para pagar el 12% de déficit público.

No hay dinero en Disneylandia. 

Como mi hija me explicaba a mí el otro día, si alguien no se fía de ti porque le has engañado, no te va a dejar dinero. 

En los entornos anglosajones se habla mucho de Accountability. Rendición de cuentas.

Eso es lo que deberían hacer ahora todos y cada uno de los gestores públicos.

Porque los números escandalosos que tenemos en España sólo son consecuencia de la MALA GESTIÓN

Corea, con una población similar y un 30% de gasto sanitario frente al 40% en España ha conseguido controlar la pandemia mucho mejor que aquí.

Portugal, con un gobierno de izquierdas, también tiene controlado al virus y va a salir fortalecido de la crisis.

No es un problema de ideología. Es un problema de personas y mala gestión.

Espero que les quede algo de vergüenza y dimitan en bloque y dejar a personas con experiencia en gestión. Pero es una utopía.

#5 El ecosistema de innovación como solución de la crisis

Si algo ha demostrado toda esta situación del COVID es que la innovación es parte de la solución: 

  • La carrera por el desarrollo de tratamiento y vacunas, 
  • la colaboración abierta de equipos de científicos, 
  • comunidades de makers creando respiradores en 3D y mascarillas artesanales,
  • las empresas que han reorientado su producción a hacer material sanitario,
  • profesionales de la salud dentro de los hospitales rediseñando en tres días UCIs… 

Todo esto es innovación y hay que visibilizarlo. 

A nivel mundial, puedes ver los esfuerzos que se están haciendo en innovación en este gráfico:

Fuente: https://coronavirus.startupblink.com/

De repente, ante un objetivo claro y nítido (salvar vidas), las personas se han movilizado para buscarse la vida y hacer cosas diferentes. 

El problema es que toda esta potencia innovadora puede quedarse en un espejismo. 

En España somos muy creativos, pero poco innovadores

Estas iniciativas están muy bien, pero necesitan continuidad. 

¿Cuántas pueden escalar? ¿Qué otros retos podemos afrontar? Cómo pueden entrar más ideas para resolver retos? 

Corremos el riesgo de que sea un impulso sin continuidad

La solución para salir de esta parece clara: colaboración público – privada en construir una economía basada en el conocimiento.

Pero como escuché en un webinar hace poco, el factor limitante para conseguirlo no son los recursos. 

Es la falta de talento en las instituciones públicas.

***

Estas son mis reflexiones personales. Cierro un capítulo. A partir de ahora, vuelvo a mi círculo de influencia.

A las cosas que realmente puedo cambiar.

A ayudar a profesionales de la innovación a desarrollar innovaciones que mejoren el mundo.

6 comentarios

Se puede decir más alto pero no más claro y además están restringiendo nuestras libertades en un ciclo sine die, que lo que demuestra nuevamente es incompetencia, incompetencia que se trata de ocultar con propaganda..

Suscribo una y cada una de las palabras que has redactado en tu post. Creo que has condensado de manera muy clara lo que muchos llevamos rumiando en nuestras cabezas durante este tiempo. Lastimosamente, comparto contigo la visión de que los puntos 4, y especialmente el 5, son una utopía y su incumplimiento nos llevará a lastrar más aún nuestra economía. No hay ni líderes ni estadistas, hay burócratas que, además de perseguir su interés político (ergo, económico) apalancando su posición dentro del estado, son grupúsculos inexperimentados con muy baja capacidad, ya no solo de gestión, sino de trabajar como lo hacemos todos nosotros: por consecución de resultados.

Carlos Romero Sala

Tenías que soltar todo esto. Entiendo que en una situación tan desconocida como la que estamos enfrentando hay que asumir que se puedan cometer errores, pero hay algo tan básico como que no se puede enviar a la guerra a un ejército armado sólo con tirachinas y escopetas de juguete. Y es lo que han hecho con los sanitarios: de muchos graves errores que han cometido ya se inventarán la forma de escaquearse, pero espero que no salgan indemnes de haber mandado a los sanitarios al abismo. De no ser así, jamás creeré que hay justicia.

Ignasi Papell-Garcia

Comparto totalmente la reflexión y la indignación, y cada vez me siento más deplazado por el discurso oficial, venga de donde venga: ¿cómo pueden decir según qué cuando uno ve, toca y sabe a ciencia cierta que profesionales sanitarios y personal en residencias están totalmente abandonados a su suerte? ¿cómo se puede hablar de según qué cuando yo no he podido despedir a mi tío fallecido – no he podido ni abrazar a mi padre!!-? ¿cómo pueden decir que las cifras son «buenas»? ¿cómo pueden hablar de guerra cuando lo que se pide son recursos y acompañamiento, consuelo, tratamiento?
Y ahora cuando digan que la innovación no podrá ser de momento o que la sostenibilidad no toca ahora, me quedaré mudo, irritado y confuso, porque creo que es ahora o ya nunca más.
Gracias por el post, Ángel. Abrazos y ánimos.

Pues a mi ha sorprendido este post, con comentarios muy típicos y poco constructivos: «Espero que les quede algo de vergüenza y dimitan en bloque», «los sanitarios no son héroes», «gestores incompetentes», «nos han mentido sobre el impacto de la pandemia»…
A diario, estoy rodeada de expertos que saben cómo resolver esto, en mi empresa, por la calle, en las redes sociales. Ellos lo hubieran hecho mucho mejor.
Claro que mienten en política, y en la vida cotidiana que nos rodea, nuestros jefes, compañeros, ..todos lo hacen. Pero en este caso, no sabían a qué se enfrentaban, pero es más fácil decir que nos mienten, o decir que ya estaba pasando en China, Korea e Italia. O que se sabía desde el 2014! En fin. Nadie en su sano juicio hubiera deseado que pasara esto.
Ha habido muchos fallos, se han equivocado. ¿Y quién no se equivoca? No hay proyecto que no tenga una cagada, al comprar un equipo, al montar una instalación, en la puesta en marcha.
Pero qué listos son los CEOS, los economistas y gestores, esos sí que nos van a sacar de esta. Ellos sí que hubieran sabido interpretar los resultados de la simulación del 2019. Si no fuera por los empresarios!
En mi humilde opinión, creo que un filósofo para gestionar el ministerio de sanidad, puede ser más adecuado que el CEO de Vodafone o Zara. Pero eso ya lo decían Platón, Aristóteles, San Agustín..(hasta que llegó Maquiavelo). La mejor polis para Aristóteles «es aquella donde los cargos políticos son distribuidos según el mérito entre los ciudadanos que sean los mejores desde el punto de vista moral e intelectual». Y un filósofo sabe bastante de ética.
Estoy muy de acuerdo que cada ministerio debe formarlo gente preparada y con experiencia en el area en cuestión y seguramente así sea en la mayoria. Y habrá otros que no. Igual que en nuestros lugares de trabajo, hay gente incompetente hay en todos los sitios.
Es fundamental la transparencia, todos los países están ocultando cifras y datos, absolutamente todos. Es vergonzoso. Por no hablar de lo que está ocurriendo en Suecia, y todavía tienes que escuchar que son un modelo a seguir, o la inhumanidad de Holanda.
Los gestores viven en su mundo de cifras macroeconómicas, en sus acciones y sus diagramas de bolsa, y se olvidan de la ética. Esto es justamente lo que falta. Más ética, más empatía, más comprensión y paciencia, más soluciones y más responsabilidad en toda esta distopía que estamos viviendo.

Concepción Guzmán del Castillo

Suscribo tus palabras y las hago mías, yo si he pasado el covid (aún estoy en ello), aunque nadie me ha hecho la prueba, sólo se la hacen a las personas que van al hospital i/o hospitalizadas, las que llaman por tener los síntomas ni vienen a hacértela ni se preocupan de que pueda ir a más, y no estoy criticando a los sanitarios precisamente, sino al sistema de gestión que las grandes mentes pensantes han proyectado para, según estas mentes, no colapsar el sistema sanitario. Pues después de dos meses de haberme infectado, a día de hoy sigo con problemas en la garganta y en la boca, y en la que lo mejor que puedo hacer es quedarme en casa para curarme.
Entiendo que sea algo imprevisto, pero tenemos la mejor sanidad pública del mundo y, ni tan siquiera ahora, les dan la importancia que tienen y merecen. Por eso reniego de estas mentes pensantes que les dicen a los sanitarios que a sus pacientes, si no se están ahogando, que no acudan a los hospitales y que se queden en casa sin más pautas que un paracetamol y ninguna visita, ni siquiera una prueba de rigor para formar parte de las estadísticas.
Y éste, si és un problema, que nuestros servicios sanitarios, judiciales y de cuerpos de seguridad del Estado estén bajo el mando de estúpidos desleales, antipatrióticos y, lo que es peor de todo, incultos arrogantes.