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Innovar es un 99% de transpiración y un 1% de inspiración

Aquí conseguirás las dos cosas. Todas las semanas. 

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Mira. 

Hace unos años, estaba haciendo una presentación a un director general de una de las empresas más conocidas de España. 

Yo llevaba hablando con el director de innovación varias semanas, sobre un posible proyecto. Y le había enviado una presentación de 30 diapositivas.

Era finales de julio. 4 de la tarde. No hacían jornada intensiva. Esas moderneces.

Cuando bajé del coche, el aire caliente me pegó un bofetón. 

Tras pasar el control de seguridad me llevaron a una sala, a esperar. 

Notaba las marcas de sudor en la camisa. No recuerdo si olía o no. Pero era una sensación incómoda.  

En estas, que entró el director general en la sala, con 5 o 6 personas más. Llevaba una carpeta con una única página en la que había 4 diapos de toda mi presentación. 

Suficiente para tomar la decisión. 

Después de que explicara la propuesta, se hizo el silencio en la sala. 

Las gotas de sudor caían por la espalda, a pesar del aire acondicionado. La camisa de empapada de sudor como si fuera Rafa Nadal . 

Entonces, el director general me miró y me dijo la mejor definición que nadie ha hecho nunca de a lo que nos dedicamos. 

«Entonces, vosotros sois como entrenadores personales en el gimnasio ¿verdad? Decís a los equipos los ejercicios que tenemos que hacer, y os aseguráis que los hacemos. Me gusta. Ya le podéis dar caña a los equipos. Y aseguraos que los equipos hacen siempre todas las flexiones que les pedís.»

(Proyecto firmado y ahora es uno de nuestros clientes favoritos, tras 3 años con ellos). 

Bien. 

¿Qué aprendizaje hay en esta historia?

Pues que innovar requiere sudar la camiseta. Y tienen que hacerlo los equipos, no los consultores. Y que es difícil. Mucho. 

Si alguien te dice que innovar es fácil, hacer dos talleres con post-its y ya está, no tiene ni puñetera idea. Y lo peor, te está engañando. 

Nuestro trabajo en Innolandia es hacerte sudar. 

Inspirarte y hacerte sudar para que puedas innovar en serio. 

This is the way. 

Por eso he creado “El micropost de Innolandia”, una newsletter GRATUITA que envío semanalmente con historias inspiradoras y casos que te pueden ayudar a innovar. 

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No te voy a explicar que tu día a día de innovador es muy muy difícil. 

Todo el tiempo peleando con trolls, personas que te ponen palos en las ruedas, falta de presupuesto, que nadie te hace caso. Excusas de todo tipo. 

Porque los innovadores vamos contra corriente. 

Somos moscas cojoneras que buscamos explorar nuevas formas de hacer las cosas, porque de ello dependen las nóminas del futuro. 

Y eso, está mal visto en el 99,9% de las organizaciones. 

Porque no sacamos cajas hoy. No conseguimos una venta hoy. No pagamos las nóminas de este mes. 

Hay demasiadas personas que eso no lo entienden. 

Y como no lo entienden, pues se ponen de nalgas. Pasan de nosotros (lo menos malo) o poner palos en las ruedas (lo habitual).  

Es agotador.  

A veces dan ganas de enviarlo todo a la M.

Pero no estás solo. Hay más de 6.000 profesionales de la innovación que forman parte de la comunidad de Innolandia. 

Que tienen problemas parecidos a los tuyos y que reciben ideas inspiradoras todas las semanas. 

Por cierto, soy Ángel Alba, consultor artesano de innovación,  fundador y CEO de Innolandia.es.

Si quieres, puedes apuntarte y además del Micropost, recibirás en tu correo un mini curso re-aprender a innovar de verdad.

Herramientas para sudar la camista. 

Historias para inspirarte y aplicar en tu caso.  

Ángel Alba -sobre mi

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