Parece que esto empieza a ser tradición.
Escribo este post desde las playas de Almería, donde estoy descansando unos días con mi mujer y los dos peques.
Y el motivo es que el año ha sido muy bueno.
De hecho, el mejor desde que arranqué Innolandia en 2012.
No solo en facturación, sino también en crecimiento profesional y aprendizajes.
Hace unos días le explicaba a un amigo que funciono por años escolares (lo aprendí del maestro de la marca personal Andrés Pérez).
Y que así dependiendo cómo haya ido el año, la escapada familiar se convierte en una recompensa genial, que comparto con mi familia (a la que le robo bastante tiempo durante el año).
Quiero compartir contigo lo que he aprendido, lo mejor y lo peor y como todos los años, mis objetivos para el siguiente curso.
Qué ha pasado en el curso 2016-17
En cuanto a actividad, el año ha sido una completa locura.
Y esa dedicación absoluta ha tenido impacto. Aquí van algunas notas generales:
- Cuento ya con 3.495 suscriptores en el blog, un 40% más que el año pasado. A partir de unos posts que he idos escribiendo en LinkedIn, me han traído mucho tráfico al blog.
- Y eso me permite llegar a 233 clientes de 8 países desde 2012. Este año he conseguido 75 nuevos clientes online y 7 offline, manteniendo mi línea de crecimiento.
- El 47% de los ingresos ya viene de servicios de mentoring a equipos innovadores (en la mayoría de los casos aplicando mi modelo Kinder Garden) y el resto de los proyectos offline han sido creando equipos a medida con consultores senior.
- He facturado el 54% de mis horas disponibles para proyectos offline, que es más de un límite razonable del 50%. El otro 50% es para blog, venta y temas administrativos y gestión en general.
- Los ingresos online crecen un 10% (no han parado de crecer desde 2012), aunque no en % respecto al total. El modelo de negocio es radicalmente diferente on y offline y no dependen de las mismas palancas.
- He realizado 3 grandes experimentos sobre nuevas ideas (2 no salieron y 1 sí está en la fase de validación de clientes, el curso Design Thinking Paso a paso)
- Este año he trabajado mucho con la EOI y eso se ha notado. Ahora te cuento más.
Lo mejor del curso 2016-17
#1 He alcanzado la velocidad de crucero. Modelo de negocio validado!
El otro día hablaba con Ana Poveda, de Grupo Enfoca sobre la venta de proyectos de consultoría y la necesidad de recurrencia, para conseguir un modelo de negocio sostenible.
Y, aunque no he llegado al 100%, sí que parece que estoy en un punto de estabilidad que me permite sentar las bases de los próximos años.
Resumiendo: he validado mi modelo de negocio, como me planteé hace 18 meses!!
Estoy super orgulloso.
Con un par de clientes importantes recurrentes, un negocio online estable que aporta y crece y un par de servicios que funcionan bien y con futuro (DXperience y Mentoring), creo que es el momento de tomar decisiones para asegurar las bases para que el futuro de Innolandia.es sea sostenible.
En las próximas semanas veréis un cambio de cara en el blog.
Y estoy aumentando el equipo de Innolandia.es, para acelerar la innovación interna.
Dos decisiones conscientes para el futuro cuando las cosas van bien.
#2 Visualizando el impacto de mi trabajo para motivarme
Como te decía antes, he trabajado mucho con la EOI, Escuela de Organización Industrial, que depende del Ministerio de Economía y Competitividad en España.
He sido mentor de proyectos en 3 iniciativas coworking (Cartagena, Benissa y Orihuela), ayudando a 15 emprendedores a sacar sus ideas adelante. Como en toda la innovación, necesitas volumen para tener alguna idea realmente potente. Y en alguna he podido participar ?
Y además desde Febrero llevo la Dirección de los cursos de logística del plan de garantía juvenil de la zona de Levante. Ayudando a chavales a encontrar empleo.
En ambos casos puedo ver muy rápido el impacto de mi trabajo: bien en proyectos que son capaces de validar un producto mínimo viable en poco tiempo (90 días de la idea al mercado) o porque los alumnos encuentran empleo.
La otra forma de ver el impacto de mi trabajo de forma rápida es con los experimentos online.
Dice mi mujer que me pongo más contento cuando consigo una venta online de un curso de 100 € que con un gran proyecto. Y eso es por la inmediatez del resultado respecto al esfuerzo.
Aplicable directamente a tus equipos de innovación: si ven rápidamente los resultados de su trabajo, serán capaces de mantener la intensidad y la motivación alta.
Es la base de la innovación ágil y de todo lo que escribo en el blog.
Si has participado en proyectos europeos plurianuales sabes lo que es bajar los brazos, verdad??
#3 El modelo de mentoring funciona de verdad
Cada vez lo tengo más claro.
Los profesionales de la innovación necesitan un apoyo en su trabajo, no una externalización completa.
Alguien que te guíe en el camino, en las herramientas a utilizar, mientras vas aprendiendo. Y no te quedes dependiendo de la consultora X y su metodología
Si quieres crear una cultura innovadora, no debes externalizar la innovación. Pero sí contar con apoyo externo para ver las cosas desde otra perspectiva.
Pensar fuera de la caja.
Y me lo han dicho varios clientes: no cualquiera vale.
El mentor no es un coach (palabra maldita), porque el mentor ha pasado antes por tu camino, aunque no sea del mismo sector, y eso ayuda mucho. El mentor propone cosas, aunque la decisión final sea tuya y el coach no.
Y además es un psicólogo que te escucha.
He sido mentor de 3 proyectos europeos del Instrumento Pyme y varios a nivel nacional, alguno con impacto mediático.
Mola mucho cuando alguno de tus proyectos sale en prensa nacional. Te da un subidón…
#4 La red crece. Y DXperience es una bomba
La colaboración es uno de mis 3 valores fundamentales (los otros son agilidad y la experimentación continua).
Este año se ha consolidado con varias colaboraciones, ya que en todos los proyectos de consultoría hemos creado equipos a medida, así podemos abordar retos importantes con personas senior con experiencia demostrada.
Algunas veces, soy yo el que vende y crea el equipo. Y en otras ocasiones me llaman. Aporto todo lo que sé, a pecho descubierto.
La franqueza es básica para la colaboración.
Es el modelo de trabajo en red.
Ya no del futuro, sino del presente.
Es la estrategia de crecimiento de los negocios del conocimiento (y de innovación), donde el activo número 1 son las personas.
Ya escribí de esto hace algunos años en el blog, como una de las grandes innovaciones en el modelo de negocio de los servicios profesionales.
Y de la colaboración que más orgulloso estoy es de la que hacemos con Grupo Enfoca y nuestro programa modular DXperience.
Hace un par de años nos metimos en una sala a aplicar Design Thinking y diseñar un servicio que nos permitiera paquetizar lo que sabíamos hacer, buscando lo mejor de cada uno.
Pero centrado en el usuario y no sólo en nuestras fortalezas. Hemos tenido que aprender cosas en el camino, porque era lo que necesitaban los clientes.
Un año de desarrollo, validación con clientes en entrevistas (nuestro test se llama “levantar la ceja”) y este curso ya estamos haciendo proyectos con grandes clientes.
Lo peor del curso 2016-17
#1 El lado oscuro de vender mucho
He sufrido en mis carnes lo que veo todos los días en personas como tú.
El día a día me ha absorbido, centrado en ejecutar proyectos.
El tiempo dedicado a proyectos de innovación propia del negocio se ha reducido bastante, debido a la alta ocupación de horas de “delivery” y viajes. En total el 67% de las horas disponibles. Puedes ver en el gráfico el último trimestre:
Franck Scipion de Lifestyle Al Cuadrado, lo define como “un problema de ricos”.
Si trabajas mucho es porque has vendido mucho y vas a facturar mucho.
OK, de acuerdo
Pero para mí ha tenido 2 consecuencias, que no me han gustado:
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2 pequeñas crisis de salud que me han obligado a parar 2 veces
En diciembre y en abril he tenido que parar y coger días de vacaciones, por pequeños problemas de salud. De hecho he tenido que renunciar a algún proyecto por eso.
Un ritmo de 12 horas de trabajo diario no se aguanta. O por lo menos yo no.
Pero es que además, ser creativo con ese nivel de trabajo es, como mínimo, imposible
Conozco personas que sí que trabajan esas horas y más.
Yo no estoy dispuesto. Es una decisión personal que afecta a mi calidad de vida.
Cada uno que haga lo que quiera.
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Desde septiembre a febrero mi dedicación a la innovación interna ha sido: 0 horas
Así de duro. Y eso es un problema de cara a futuro.
Lo importante es que me he dado cuenta y estoy poniendo en marcha acciones para rectificar.
En el último trimestre he dedicado 20 horas registradas a innovar en mi propio proyecto.
Aún me falta bastante.
Si quieres ver como estoy blindando mi tiempo para innovar, échale un vistazo a mi serie para suscriptores “En busca de la piedra filosofal”.
#2 Las dudas sobre el crecimiento
En julio y diciembre realicé dos experimentos orientados a escalar el modelo online y no funcionaron.
Además, mis indicadores de validación del modelo online no crecían a la velocidad que deberían.
Así que decidí llamar a mi amigo Néstor Guerra y tomarme un café con él para una segunda opinión médica sobre el enfermo.
Este es el proceso que te recomiendo: experimentar, contar con indicadores accionables y si no funcionan, aprender y pedir ayuda externa si tú solo no puedes.
Me confirmó el diagnóstico que yo tenía: no hay un modelo online puro para servicios profesionales que funcione, sino que son modelos mixtos on-off, donde cada cliente elige el que más le conviene.
Incluso los más avanzados, como Edem Mccallum, son mixtos: venta y gestión del equipo online pero el delivery es off.
La segunda patología también era conocida: el mercado de la innovación en España es muy pequeño.
Conclusión: seguir trabajando en mi propio modelo, que en el fondo es mixto y llega a todos los países de habla hispana.
No se trata de pivotar, sino de iterar y volver a entender mejor a personas como tú, profesionales de la innovación, para ver cómo te puedo ayudar.
Un poco de reflexión estratégica
En este proceso de análisis y aprendizaje sobre lo que ha funcionado y lo que no, para validar el modelo de negocio, he llegado a un punto en el que necesito revisar la visión de Innolandia.es
Siguiendo el modelo de Steve Blanck y Customer Development, hace un par de años definí la visión de la propuesta de valor a 18 meses vista de Innolandia.es, que puedes ver aquí:
Una vez validado con datos reales el encaje de la propuesta de valor on-off y superada la fase de descubrimiento de clientes, necesitaba desarrollar una nueva visión de futuro, orientada al crecimiento y la escalabilidad en la fase de validación de clientes.
Y así queda mi visión para 2020:
Ayudar a 5.000 profesionales de la innovación en todo el mundo a desarrollar empresas y soluciones innovadoras.
La meta es realmente motivante, porque he ayudado a 3.200 personas en 5 años. Ahora quiero llegar a los 5.000 (2.000 más) en 2 años y medio, lo que me obliga a un ritmo de crecimiento mayor.
Este será el faro que me guíe durante los próximos años.
Concretando los objetivos del próximo año
En un mundo cambiante, la planificación a largo plazo está sobrevalorada
Al final dedicar mis esfuerzos a la microgestión y la superplanificación es una pérdida de tiempo. Y como te he dicho, tiempo tengo más bien poco 😉
Siguiendo el enfoque de GTD, tengo claro mi foco a largo plazo.
El siguiente paso es marcar objetivos para este año y poco a poco ir desarrollando los proyectos que me acerquen a ellos.
Pero sin frustraciones.
El tiempo es finito
Lo importante es avanzar en la dirección correcta y disfrutar del viaje
Para este año, mis objetivos serán:
#1 Enfocarme en productos y proyectos rentables
Ya has visto mi dedicación en horas. Demasiadas.
Por eso mi enfoque para este año será iterar en los dos productos que mejor funcionan (DXperience y Mentoring) y analizar mucho los proyectos de consultoría que me llegan para tomar decisiones conscientes de colaborar o no.
Estoy controlando el tiempo dedicado a cada proyecto, para identificar las «fugas» de horas.
No tanto por un problema de rentabilidad, sino de salud mental.
Cuando trabajas con conocimiento intangible (y tú también lo haces) la cantidad de trabajo siempre es superior a las horas disponibles. Así que hay afinar mucho eligiendo qué hacer y huir del síndrome del perro hambriento.
#2 Dotarme de recursos para el crecimiento sostenible
Ya he empezado a invertir en las bases del crecimiento sostenible:
- nueva cara del blog: mejor experiencia para todos los lectores y más y mejores contenidos exclusivos para los suscriptores
- nuevos colaboradores más o menos estables para proyectos y back-office: optimizar las horas de trabajo disponibles
- nuevos conocimientos: más materia prima para seguir innovando
Sobre todo el ampliar el equipo es una decisión que me ha costado tomar, porque no quiero salir del barro de los proyectos. Quiero seguir haciendo proyectos mano a mano con personas como tú y no ir a un modelo clásico de consultoría de el socio vende y el proyecto lo hace el junior.
Pero sí que he identificado tareas de back-office en las que no es necesario que sea yo personalmente el que lo haga y se puede externalizar. Empezaré por tareas de administración (14% del tiempo!!) y blogging.
El último recurso, pero que me parece indispensable es del conocimiento. Voy a hacer un par de cursos avanzados de innovación este año para estar a la última en las herramientas de innovación. Del primero ya estoy matriculado para este verano.
Y después probarlas y con mi experiencia, ayudarte a que las pongas en marcha tú mismo.
#3 Acelerar el ritmo de exploración del modelo online
Mis acciones de innovación interna no van a parar.
De hecho quiero acelerar el ritmo de exploración de nuevas ideas para el modelo online, que permitan ir creciendo la aportación al negocio global, buscando la recurrencia.
Tengo un par de ideas en las que ya estoy trabajando y diseñaré durante el verano para empezar a testar en septiembre.
Mi gran reto es blindar el tiempo suficiente para desarrollarla.
Quizás este post me ha quedado demasiado largo. De hecho he tardado el triple de tiempo en prepararlo que un post normal. Pero me permite poner por escrito las reflexiones que he ido haciendo durante las últimas 2 semanas.
Espero que mis aprendizajes te ayuden a gestionar mejor tu sistema de innovación o tu propio negocio de consultoría.
¿Te has planteado ya cuáles son tus objetivos para el próximo curso?
Puedes compartirlo en los comentarios. Prometo responder.