Yo lo tengo claro.
Innovación es un área más de la empresa
Como puede ser marketing, producción o logística.
Así que necesitas un presupuesto de innovación para trabajar.
Y son pocas las empresas que tienen una línea de su presupuesto directamente asignadas a innovación.
Muchas veces los gastos e ingresos quedan ocultos en otras partidas.
- Los gastos como generales o nóminas
- los ingresos como extraordinarios (en el caso de subvenciones) y tesorería (préstamos).
Pero necesitas un centro de coste en el que incluir un presupuesto de innovación.
¿Qué necesitas incluir en un presupuesto de innovación?
Antes de presentarte ante el Comité de Dirección a decir que necesitas medio millón de euros más para tu presupuesto de innovación el próximo año, tienes que tener las cosas claras.
No te recomiendo que te presentes sin un estudio claro de en qué te vas a gastar el dinero y por qué lo necesitas.
Porque quedarás como un pedigüeñ@ y empezarán a dudar de tu capacidad profesional.
El dinero (recursos) muchas veces tapa la capacidad de gestión.
Así que pedir más dinero es un arma de doble filo y depende en qué empresa, te puedes estar jugando tu futuro profesional.
Te sugiero responder a esta pregunta antes de pedir cita con tus jefes.
¿En qué te vas a gastar el dinero?
Fundamentalmente en partidas relacionadas con personas y materiales para generar ideas e irlas desarrollando hasta el mercado y gestionar el modelo de innovación que tienes en marcha.
Si has hecho algún proyecto de innovación con financiación pública, más o menos los tendrás claros.
Son los que te piden en la memoria justificativa más gastos de “estructura fija”
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Gastos de personal
Nóminas y seguros sociales de las personas que trabajan relacionadas directamente con la innovación.
No sólo las del área, sino también los imputados de otros departamentos: Project management, equipos que participan en sesiones de creatividad o pruebas…
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Materiales utilizados para pruebas y test de innovación.
Está todo dicho. Materias primas, uso de maquinaria, laboratorio…
- Conocimiento técnico externo.
Aquí se incluirían todos los gastos de contratos con centros tecnológicos, universidades o empresas tecnológicas en los que adquieres un “activo” (patente o no). Por ejemplo, el uso de instalaciones universitarias entraría en este apartado
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Asesoramiento externo.
Este es un gasto parecido, pero no es el mismo.
Aquí se incluyen servicios de consultoría y apoyo, como la búsqueda y justificación de financiación pública, contratar jefes de proyecto independientes o contratar consultores para auditar o relanzar el sistema de innovación (este es mi caso en Innolandia.es).
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Formación
Cursos, talleres, formación online…. Todo lo que hagas para aumentar las capacidades de las personas de tu empresa para innovar. Y formación interna o externa.
El momento de la verdad: la reunión para pedir más
Has realizado un análisis en profundidad, tienes un plan de actividades claro para los próximos meses y tienes los números.
Ahora toca enfrentarse al Comité de Dirección y conseguir más presupuesto para innovar.
Te propongo 5 argumentos con los que he ayudado a algunos de mis clientes:
#1 Invertir en innovación es rentable.
Los directivos entienden muy bien cuando les hablas de números económicos y de impacto en negocio. Así que este es un argumento muy potente:
- Por cada euro invertido en innovación, se aumentan las ventas en tres euros
- La rentabilidad de la innovación de las empresas españolas, que lo hacen de forma mantenida es del 10%.
- El 65% de las empresas que invierten en innovación han conseguido un impacto directo en la cuenta de resultados
Fuente: Radiografía de las empresas innovadoras en España 2014, Innolandia.es
#2 La innovación abre nuevas oportunidades de negocio
Otro argumento que entiende muy bien la dirección es que la innovación abre nuevas oportunidades de negocio.
Según un estudio de Pricewaterhouse, las empresas innovadoras crecen el triple que las empresas que no innovan.
¿Dónde?
- En nuevos nichos de mercado: Las empresas innovadoras renuevan la cartera de productos cada 3 años
- En mercados exteriores: Las empresas innovadoras exportan el doble que las no innovadoras
- En nuevos sectores: Innovar permite explorar oportunidades en otros mercados diferentes a los tradicionales de la empresa y diversificar.
#3 La competencia también lo hace
No hay nada que más fastidie a un directivo que ponerle en el espejo con su competidor más directo y ver que sale perdiendo.
Así que esa es una técnica a utilizar, pero con cuidado.
No hay sectores innovadores. Hay empresas innovadoras.
Y las puedes encontrar en todos ellos.
Yo he trabajado en los últimos meses en sectores tan diferentes como agroalimentación, biotecnología o construcción y en todos y cada uno el argumento ha funcionado:
“¿Sabes que fulanito acaba de conseguir un proyecto europeo de innovación?” o “¿Has visto a la empresa X en el ranking de las empresas más innovadoras?”
Ojo con este argumento. No abuses de él siempre que quieras conseguir algo, porque te pueden responder que “Sí, pero esa no es nuestra estrategia” y tumbarte tu petición.
Pero en situaciones puntuales sí funciona, sobre todo la primera vez.
#4 Si queremos jugar la Champions, tenemos que invertir
Es curioso.
Nadie se plantea conseguir una subvención o financiación pública para abrir un nuevo almacén en otro país.
Pero muchas empresas deciden eliminar gastos de innovación o aprobar proyectos
Pues si quieres jugar la Champions, tendrás que invertir.
Si de verdad quieres ser una empresa innovadora no te queda otra que poner dinero de tu bolsillo.
Porque es una inversión y una apuesta. Con su nivel de riesgo.
En España, el 81% de las empresas que innovan lo hacen con su propia inversión.
Y si luego hay ayudas públicas, mejor, son ingresos extraordinarios.
Puede que la decisión sea no jugar la Champions.
Competir como siempre, con otras armas.
Es muy respetable.
Pero luego luego no te quejes.
#5 La innovación está en nuestros valores, pero nadie se lo cree
Especialmente después de la crisis, muchos departamentos de innovación han saltado por los aires.
Los presupuestos de innovación se han quedado a cero.
Y mientras, en la web de la empresa sigue apareciendo la innovación como un valor diferencial. ¿Quién se lo cree?
Puedes preguntar a algunos de tus compañeros sobre qué piensan de la innovación y quizás te sorprendas. No tienen ni idea ni les importa.
Sois los locos de las batas blancas.
Los que váis a hablar con la Universidad de turno, pero nadie sabe qué hacéis.
Pues asignar una partida importante al presupuesto de innovación es la forma más clara que tiene la dirección de apostar por algo y demostrar con el ejemplo, que cree en la innovación.
Ya sabes, que sin el impulso del liderazgo, poco puedes hacer.
Y el liderazgo, representado por el Comité de Dirección o la Propiedad es el que tiene las llaves de la caja fuerte y puede aumentar tu presupuesto de innovación.
Seguro que hay muchos colegas como tú que tienen este problema. ¿Me ayudas a compartir el post en las redes sociales?