
Medir el avance de un proyecto de innovación a veces no es sencillo
De hecho es una obsesión con mis clientes en los últimos meses.
Saber cómo está el proyecto
Y después, la cartera.
Para finalmente, tomar decisiones.
Porque eso es gestionar la innovación y no hacer proyectos.
Mira
Habitualmente nos dedicamos a hacer tareas
Y poco a ver cómo avanzamos
Entonces llega el Comité de Innovación y explicamos lo qué hemos hecho
Pero no cómo de lejos estamos del objetivo.
No podemos comparar.
Entonces nos cuesta decidir si matar o no un proyecto
Porque no tenemos criterios objetivos
Para eso necesitas un cuadro de mando, como el que te explico en este post.
Vamos!
Diferencias de objetivos (a veces no muy claras)
#1 Entre proyectos de ejecución y proyectos de innovación
Si tienes experiencia en gestión de proyectos tradicionales (PMP, Prince2, etc…) puede que en este post te estalle la cabeza.
Porque las métricas que se utilizan para gestionar proyectos de innovación no son las mismas que para los proyectos tradicionales.
Los proyectos tradicionales tienen que cumplir unos resultados sobre un plan prefijado.
Por ejemplo, proyectos de instalaciones o de mejora continua.
Existe riesgo, pero básicamente es de ejecución. Y eso es bajo.
En los proyectos de innovación, el plan varía con el tiempo.
Porque la incertidumbre es muy alta y tu objetivo es encontrar evidencias que reducen ese riesgo, a través de experimentos.
Así que no se puede medir igual.
#2 Según el grado de madurez del proyecto de innovación
Otra variable importante para medir el avance de un proyecto de innovación es la fase en la que se encuentra.
El objetivo es muy diferente
Y para eso tienes que ubicar tus proyectos en un embudo de innovación.
En el blog puedes encontrar varios post sobre cómo diseñar y poner en marcha un embud.
Yo aplico habitualmente un embudo de 4 fases y tres puntos de evaluación.
Y están muy relacionados con las fases del Customer Development de Steve Blanck:
- Ideación
- Maduración (relacionado con Customer Discovery)
- Proyecto (relacionado con Customer Validation)
- Escalado
El objetivo en cada fase es diferente.
Y por tanto las métricas para medir el avance de un proyecto de innovación también.
Recuerda que tu objetivo, especialmente en la fase de maduración, es reducir el riesgo de la idea o del modelo de negocio.
Tendrás un periodo de tiempo para hacer los experimentos, para evitar crear proyectos zombie.
A medida que un proyectos de innovación va reduciendo la incertidumbre, la forma de medir el avance del proyecto se va acercando más a los tradicionales.
5 preguntas que debes responder durante tu proyecto de innovación
Uno de mis conceptos favoritos y que mis clientes están hartos de escucharme es las características de una idea innovadora de éxito.
Básicamente son tres:
- Deseable por los usuarios
- Factible tecnológicamente
- Viable en cuanto a rentabilidad
Cada una de estas características supone riesgo. Riesgo comercial, tecnológico y de negocio.
Al principio, no tienes datos que validen tu idea.
Necesitas hacer experimentos para conseguir evidencias que te digan que vas por buen camino.
El problema llega cuando intentamos aterrizar estas características a algo concreto, que podamos responder.
Y así tener una guía más o menos clara de cómo medir el avance de los proyectos de innovación.
La respuesta para mí son 5 preguntas muy sencillas de formular, pero complicadas de cumplir.
Son los hitos de cualquier proyecto de innovación.
Y están basadas en los hitos de teoría de Customer Development, que hemos simplificado en Innolandia.
#1 ¿El problema del usuario es real?
Necesitas confirmar que el problema es real y no fruto de un caso particular o tu intuición.
Y que el mercado es suficientemente interesante. No quiere decir grande, porque puede ser de un margen muy interesante pero pocos clientes.
#2 ¿Nuestra solución resuelve el problema?
Aquí es cuando comprobamos si tenemos una idea de bombero o algo con potencial.
Cuando encontramos clientes que les llama la atención tu solución.
Nosotros lo llamamos internamente “levantar la ceja”
#3 ¿Los clientes están dispuestos a pagar por la solución?
El cliente sólo habla de una forma: con la tarjeta de crédito.
Puede que estén interesados en nuestra idea, pero quizás no sea tan genial como para pagar por ella.
Y sin pagos no hay paraíso.
#4 ¿Somos capaces de construir nuestra solución de forma rentable y con calidad?
Puede que hayas llegado al hito de que alguna persona despistada (early adopter) pague por una primera versión súper básica de tu solución.
Pero no es suficiente. Necesitas validar que puedes desarrollar tu solución técnicamente completa y con calidad.
Es la única forma de rentabilizar el proyecto.
#5 ¿Atraemos clientes de forma recurrente y rentable?
Muchos proyectos de innovación fracasan en esta pregunta. El equipo del proyecto sale antes de tiempo y deja el proyecto en manos del área comercial
Necesitas validar qué canales, estrategia de precios, comunicación, etc… realmente funciona para el proyecto.
#BONUS ¿Ganamos dinero con cada unidad vendida?
Hay una pregunta bonus.
Pero que es la que cualquier persona de tu Comité de Dirección está esperando.
¿Ganamos dinero con cada unidad vendida?
¿El proyecto se puede convertir realmente en un motor de crecimiento de la organización?
Ahora que tienes claras los hitos a cumplir vamos a ver cómo puedes aplicarlas en tu día a día.
El cuadro de mando para medir el avance de un proyecto de innovación
En los últimos años, varios autores están intentando definir diferentes métricas para medir el avance de la innovación.
Quizás fue Eric Ries el que empezó a hablar de la “contabilidad de la innovación” en su libro “Lean Start-up”.
No se refería tanto al impacto de la innovación (eso lo define bastante bien el Manual de Oslo de la OCDE).
% de ingresos o ahorros de costes por nuevos productos o procesos
Sino a cómo medir los avances de un proyecto de innovación, que está aplicando metodologías ágiles, tipo Lean Start-up.
Él hablaba del concepto de “aprendizaje validado”.
El aprendizaje validado es una métrica sobre cuánto has aprendido, con datos reales del mercado, sobre las hipótesis de riesgo de tu proyecto de innovación.
Así que uniendo las diferentes piezas, diseñé un cuadro de mando muy básico en Excel que, testamos con mi proyecto Consultify y ahora aplicamos con nuestros clientes.
Además, está incluido en la Yellow Lean Box de Innolandia.
#1 Los hitos del proyecto
Dentro de los hitos del proyecto, aparecen las 6 preguntas que te explicaba más arriba.
Para cada una de ellas, tienes dos columnas, que irás rellenando según avance el proyecto:
- Métricas
Aquí registras los datos reales de los experimentos realizados. Puedes tener más de un experimento por cada hito.
¡¡Pero ojo, no te pierdas en el círculo del experimento infinito!! Hay que avanzar.
Por ejemplo, en el caso de Consultify realizamos dos experimentos para validar que el problema era real y anoté los resultados.
35 personas asistentes a un webinar específico y 1er problema seleccionado por los consultores en el estudio Barreras para innovar 2018.
- Aprendizaje validado
En esta columna describes cuál es la conclusión del conjunto de experimentos que te lleva a validar o no el hito.
Por ejemplo en Consultify tras varios experimentos para la pregunta 5 el aprendizaje validado fue que los consultores se quejan de su situación (muchos leads) pero no están dispuestos a dar el salto de pagar por un programa formativo (mínimas conversiones).
Y decidí matar el proyecto.
#2 Métricas para la gestión de la cartera
Un segundo elemento que puede ser de utilidad son las métricas de cartera.
Se trata de cuatro indicadores que te permitirán comparar diferentes proyectos en cartera.
Son los que aparecen en gris en la parte superior:
- Time to market, a partir de la diferencia entre fecha de inicio y día actual
- Coste de desarrollo, donde puedes incluir los costes de los experimentos realizados. Yo habitualmente no incluyo los costes de nóminas, pero sí las dedicaciones externas
- Aprendizaje validado: número de hitos alcanzados
- % Riesgo reducido: Se calcula restando el número de hitos alcanzados a 6 y dividido por 100. Así si no tienes ningún hito, el riesgo reducido es 0%.
#3 Cómo aplicar el cuadro de mando
Un aprendizaje que he tenido aplicando el cuadro de mando es que no siempre partes de cero.
Porque no todos los proyectos son de innovación radical y riesgo extremo.
Hay muchos proyectos de innovación incremental o adyacente, donde tienes datos reales de aprendizaje validado y te permiten enfocarte mucho mejor.
Así que cuando definas el proyecto puedes empezar por revisar el cuadro de mando y anotar los datos reales que ya tengas.
Por ejemplo, yo ya tengo datos reales de que uno de los problemas de los profesionales de la innovación es reducir el tiempo de lanzar productos innovadores al mercado.
No tengo que hacer ningún experimento adicional en este hito.
Así podrás centrar mucho más las hipótesis y experimentos, acelerando el proceso.
El segundo momento para utilizarlo es como diario de proyecto.
Anota aquí los resultados de los experimentos y que te sirva como informe de situación del proyecto.
Ya verás el tiempo que ahorras en informes y en presentaciones para el Comité de Innovación.
Angel: Creo que tu comentario inicial es clave: Habitualmente nos dedicamos a hacer tareas y poco a ver cómo avanzamos. Una de las claves de mantener la motivación en los equipos es hacer evidente el progreso. Y la larga lista de tareas solo muestra lo difícil de la tarea y todo lo que nos falta aún. ¿Se puede ser más «des-motivador»?
Los hitos, tal y como los planteas, deben ser difíciles de conseguir y, al mismo tiempo, significativos. Es decir, claramente importantes para saber si seguimos apostando allí.
Pero hay algo sobre este tema que he estado pensando hace algún tiempo. Dado que cuando hablamos de verdadera innovación, en muchos casos, no es posible construir un camino tan lineal de ejecución, ¿Será posible tener un plan de HITOS, más de tipo árbol? Es decir, ¿Que el resultado de un hito nos permita definir si se toma un camino u otro? ¿O quizá un tercer camino que ni siquiera hemos previsto hoy?
Gracias por comentar Guillermo. Mi opinión es que no puedes tener un plan de hitos lineal y menos en árbol. De hecho los hitos que propongo, aunque parece que están en línea, siguiendo la metodología de Customer Experience no tiene por qué ser así. El entorno cambia, y las hipótesis también, en función del resultado de los experimentos. Por ejemplo, si se trata de una innovación tech push, puedes arrancar por las hipótesis de producto.